Saludo del Padre Ismael Ojeda Lozano

Estimadas Madres Cristianas Santa Mónica de Perú:

Reciban este saludo mensual como expresión de mi aprecio y de mis mejores deseos de paz y bienestar para ustedes y sus familias en el Amor del Señor.

Estamos en la recta final de la Pascua, y también al culminando los noventa días de renovación para toda la Iglesia: Cuaresma, 40 días, y Pascua, 50. Hoy Jesús se va al cielo para completar su obra salvífica, regresando al Padre que le envió y sentándose a su derecha como Mesías y Salvador de toda la Humanidad. Con él nos ha sentado a todos en gloria.

Pero allá rogará al Padre que nos envíe el Espíritu. Jesús se ha ido para dejar espacio, dejar la plaza libre, al Espíritu, al Santificador, al que nos convertirá en otros "cristos" que debemos continuar la evangelización del mundo que Jesús ha comenzó y la llevó a cabo en lo esencial... Ahora la debemos completar nosotros. Para ello recibiremos el próximo domingo al Espíritu, en Pentecostés.

Pues nada, queridas hermanas, sigamos celebrando la victoria de Cristo con alegría y pidiendo al Espíritu poder cumplir la misión de esposas y de madres cristianas, discípulas de Cristo al estilo de María nuestra Madre en la fe.

No hace mucho hemos celebrado en Perú el Día de la Madre. Ha sido ocasión para renovar la fidelidad a la vocación recibida. Dentro de poco celebraremos el Día del Padre. Deseo que este año sea una celebración especial que marque sus personas y sus hogares, para gloria de Dios. Me uno de corazón a sus sentimientos y a sus oraciones para que así sea.

Bien, y no me alargo más. Un abrazo y que todo vaya bien. Dios me las bendiga.

P. Ismael Ojeda Lozano, OAR.